miércoles, 2 de diciembre de 2009

La vela de Navidad,


Las historias que invento con mamá abriendo el calendario de chocolote de Adviento



Dia 1 de Diciembre: Me sale una vela de Navidad.



Habia una vez, un pueblecito que estaba muy alejado de las ciudades, allá en lo alto de las montañas. Como estaba tan alejado, no tenían electricidad. Así, que cuando llegaba la Navidad, y decoraban el árbol, no podian tener luces parpadeantes ni de colores.

Los niños que habían visto en peliculas estos árboles luminosos, estaban un poco tristes, porque nunca habian podido cantar junto al árbol de luz y colores.


Entonces, un día pasaba por alli, un viejo anciano que vendía toda clase de objetos y también compraba las cosas que la gente no utilizaba, entre esas cosas llevaba una preciosa vela de Navidad de color verde con bolas plateadas y doradas y una cinta brillante de colores.
Cuando la vieja abuela del pueblo, la señora más anciana, la vió en una caja tirada, llena de polvo, y sucia de barro, pregunto al viejo vendedor: _¿ Cuánto pides por esa preciosa vela?.
El viejo vendedor respondió: Sólo 1o céntimos, la he recogido de la basura, ¿pero como estaba tan nueva? ¿La quiere usted?, si la limpia será un bonito adorno navideño.
La anciana abuela la compró, la llevó a su casa y la lavó y limpió con mucho cariño, mientras le hablaba de las viejas navidades pasadas, de los que ya no estaban, de lo felices que serían estas navidades.
Luego la encendió y la puso en su ventana. Cuando llegó la noche, un preciosa luz llena de colorines, empezó a brillar y parpadear, el viento mecía el fuego, acunandolo como a un bebé, reflejando en las bolas luces de colores que atrajeron a todos los niños del pueblo. Estos sorprendidos, miraban y miraban aquella vela tan pequeña y entonces rieron y bailaron felices alrededor de su pequeño árbol luminoso de Navidad.
Esta es la historia de una pequeña vela, que se convirtió en el árbol de Navidad, que más feliz hizo a niños y mayores en todas las navidades que la vieja anciana recordase.

Fin.


2 comentarios:

  1. Esta historia es para que comprendas que muchas veces las cosas pequeñas son las que te hacen más feliz.

    Mama

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  2. O que escribiu mamá é o que eu estaba pensando, para ser feliz basta con saber disfrutar das pequenas cousas, dos momentos coas persoas que queremos, da beleza que nos ofrece a natureza...

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